¿Puede un simple envase seducir nuestros sentidos?
Un envase sugerente desde el punto de vista emocional puede marcar la diferencia entre un producto y otro. Los diseños actuales de los envases son impactantes y con acabados sofisticados. Aquellos envases que incorporan diseños impactantes y técnicas de acabado de alta calidad tienen unas ventas más elevadas.
Si queremos que nuestro producto se venda bien, el envase debe resultar atractivo para los sentidos de los clientes. Es la mejor técnica para que el producto destaque en un mercado saturado y se diferencie de los otros. Este capta la atención y es muy probable que el consumidor acabe comprándolo.
El resultado es, sin duda, una mayor visibilidad de la marca.
Si además, el envase incorpora efectos inesperados o combina materiales inusuales, el impacto es aún mayor y aumentará el valor del producto o del envase. Estos acabados capta la atención del consumidor y transmite la calidad y exclusividad del producto. El acabado con estampado metálico despierta el sentido del tacto y la curiosidad y ganas de juguetear con el relieve.
¿Alguna idea para que tu envase sea el más destacado?
